El propietario de la vaca fue a la corral y se dio cuenta de que la puerta del corral estaba abierta. Entonces la vio: una cola de serpiente.
En ese momento contacto con la policía y quedó impresionado cuando vio que los agentes la sacaban de su rincón. La cola pertenecía a una pitón de 5 metros que acababa de tragarse a su vaca entera.
La vaca naranja, de dimensiones comparables a las de una mesa, salió regurgitado de la mandíbula del reptil por las patas y empapado en jugos gástricos. La vaca salió de la serpiente entera y sin un rasguño, pero ya no respiraba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario